En Loreto casi la mitad de la población no tiene acceso a servicios de agua potable y desagüe, para hacer frente a esa situación un equipo de investigadores peruanos ha desarrollado el proyecto Ciudades Auto-Sostenibles Amazónicas o simplemente CASA el cual propone la creación de un sistema de captación, almacenamiento y tratamiento de agua de lluvia. Este invento fue premiado con la medalla de plata en la última edición de la Exhibición Internacional de Inventos de Mujeres de Corea del Sur (KIWIE 2022).
Se trata de un sistema autónomo que capta el agua de las lluvia y las almacena directamente, luego toda esa agua será usada en las duchas y lavanderías de los pobladores de la comunidad de Santo Tomás, un barrio de pescadores en Iquitos, que no cuenta con agua y desagüe.
Agua para todos
En entrevista con la agencia Andina, la investigadora principal del proyecto, Belén Desmaison, explica que el proyecto CASA no solo busca innovar en tecnologías para un acceso al agua, sino también en redescubrir qué significan los espacios públicos colectivos.
“Construimos la lavandería y las duchas con un sistema de tubos de PVC que son los que almacenan el agua. Tiene un techo de dos aguas pero invertido, que recolecta el agua que pasa por estos tubos. Además, cuenta con una bomba que funciona con energía solar, la cual bombea el agua con presión para la ducha. Es una tecnología de bajo costo, fácil de replicar y mantener,” explica la arquitecta.
Junto a ingenieros químicos de la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana también se evaluó la calidad del agua de la lluvia, para comprobar si tiene condiciones óptimas para ser utilizada por los pobladores.
“El agua de lluvia es limpia pero requiere de otro tratamiento para que pueda ser bebible. Sin embargo, el problema es que actualmente no se cuenta con normativas que digan cuáles son las condiciones óptimas que debe tener este recurso para que pueda ser aprovechado o potabilizado para el uso doméstico, es por ello que en el proyecto es utilizado solo para las actividades de lavandería y aseo personal”, detalla Belen Desmaison.
Luego del uso en la lavandería- agrega la investigadora – esas aguas con detergente o jabón no van directamente a los ríos, para ello se propuso trabajar un sistema de fitodepuración que limpia el agua antes del retorno al río y así minimizar la contaminación.
El proyecto financiado por la PUCP cuenta con un equipo multidisciplinario de ingenieros ambientales, mecánicos, sociólogos y arquitectos. Actualmente se encuentra en proceso de lograr una patente de modelo de utilidad.
“Este tipo de proyectos de dotación de servicios básicos tiene que ir de la mano lo técnico y acompañamiento social porque su desarrollo se da en espacios colectivos y tiene que haber una consulta previa de los pobladores”, agrega la investigadora.
Ella también recuerda que cuando llegaron a la comunidad de Santo Tomás, en las periferias de Iquitos, fueron los mismos pobladores quienes decidieron la utilidad y el lugar donde se iban a construir las lavanderías y las duchas.
Actualmente el proyecto que nació a finales del 2018 y finalizó en febrero del 2020 viene beneficiando a más de 30 familias de la comunidad y durante la pandemia del covid-19, en la etapa más dura, se convirtió en un centro de abastecimiento de agua muy importante para la zona porque las cisternas dejaron de llevar agua.
Invento premiado
Este invento ganó la medalla de plata en la última edición de la Exhibición Internacional de Inventos de Mujeres de Corea del Sur (KIWIE 2022). En total, fueron 35 los inventos peruanos exhibidos en la feria. Por cuarto año consecutivo, el Perú fue el único país de América Latina presente en KIWIE 2022, así como el país con más invenciones inscritas, después del anfitrión, Corea del Sur.
“Estamos agradecidos de este reconocimiento que pone en valor a escala internacional estos esfuerzos colectivos. Es por ello que desde la academia hacemos un llamado a los gobiernos regionales y municipios para conversar y así se pueda replicar e implementar este sistema, que ya existe en otros países como Colombia y Brasil, en otras zonas periurbanas o flotantes de nuestra Amazonía,” enfatiza.
El equipo del proyecto CASA está integrado por: Urpi Vásquez (ingeniera ambiental), Klever Espinoza (arquitecto), Jorge Soria y Víctor Ramos (ingenieros mecánicos), Fernando Carpio (asistente técnico), Rosa Souza (ingeniera química), Angela Llangali y Cristina Torres (egresadas de Arquitectura) y Jorge Mercado (ingeniero de la Municipalidad Provincial de Maynas).
“Invitamos a más investigadores y estudiantes a sumarse a este tipo de proyectos porque hay mucho por hacer en nuestro país. Las oportunidades, conocimientos y ganas están allí”, concluye.