Una nueva variedad de quinua, que destaca por su alto rendimiento y capacidad productiva, notable aporte nutricional y mejor resistencia al estrés hídrico provocado en la agricultura por el cambio climático, ha sido desarrollada con éxito por investigadores del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) en la Estación Experimental Agraria ILLPA, ubicada en la región Puno.
Esta nueva variedad de quinua, el “grano de oro de los incas”, denominada INIA 446 Atipaq (palabra quechua que significa “Vencedor” y “Poderoso”), es el resultado del método de mejoramiento genético aplicado por el INIA, organismo del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) en un largo proceso de estudio y liberación que demandó seis años.
El ingeniero y PhD Jesús Arcos Pineda, investigador del Programa Nacional de Innovación en Cultivos Andinos del INIA y líder del equipo de científicos que generó esta nueva variedad de quinua, destacó en diálogo con la Agencia de Noticias Andina que, al ponerla a disposición de los pequeños y medianos productores de este superalimento, se contribuye no solo a incrementar su rentabilidad económica en más del 60% sino también a fortalecer la seguridad alimentaria del Perú.
La quinua INIA 446 Atipaq es la decimoquinta variedad generada y lanzada por el INIA y la sétima desarrollada en la Estación Experimental Illpa de Puno.
Características de la quinua INIA 446 Atipaq
Esta nueva variedad de quinua es el resultado del cruce de 17 líneas genéticas provenientes de colecciones seleccionadas de localidades productoras de quinua de la zona altiplánica de Puno.
Indicó que, mediante el método, denominado ‘compuestos genéticos’ se fue mezclando las 17 líneas genéticas y seleccionando los mejores ejemplares de los cruces hasta obtener la nueva variedad a la que se bautizó con el nombre de INIA 446 Atipaq.
Entre las características morfológicas de esta nueva variedad de quinua figura su grano grande de color blanco que tiene un diámetro de 2 milímetros, superior a otras variedades cuyo diámetro es de 1.5 milímetros.
Por su parte, la planta de esta nueva variedad de quinua alcanza una altura de va de 1.18 a 1.27 metros, la longitud de su panoja o racimo ramificado es grande llegando a tener 42 centímetros y un diámetro de hasta 11 centímetros, con una densidad media de racimo.
Asimismo, tiene un tallo con estrías o rayas de color verde, las hojas son grandes y de color verde oscuro, las flores son amarillas y abundantes.
Alto rendimiento
Arcos Pineda resaltó que la quinua INIA 446 Atipaq ofrece un rendimiento de 3 a 4 toneladas por hectárea, superando en un 30% a las demás variedades. Además, es tolerante a las principales plagas y enfermedades como el mildiu, lo que favorece a la economía del productor.
Asimismo, esta nueva variedad de quinua solo necesita de 450 a 520 milímetros de agua para su desarrollo vegetativo, lo que la hace resistente a la sequía o estrés hídrico. Su período vegetativo es de 150 a 160 días y ofrece granos de buena textura y tamaño.
Además, se adapta muy bien a condiciones agroecológicas de la región altiplánica del Perú y en altitudes de 2,500 a 4,200 metros sobre el nivel del mar, con precipitaciones pluviales de 520 milímetros por año.
“Para que la producción de quinua en una determinada región sea una actividad rentable, competitiva y sustentable es importante que los productores de escasos recursos económicos, dedicados a la agricultura familiar, tengan acceso a variedades con buena capacidad productiva y que respondan muy bien a los nuevos factores abióticos y bióticos provocados por el cambio climático”, manifestó.
Superalimento
Arcos Pineda subrayó que la buena composición genética del INIA 446 Atipaq le permite concentrar altos contenidos de aminoácidos esenciales como lisina, metionina, trionina, triptófano y antocianina, que son poderosos antioxidantes que fortalecen el sistema inmune y el funcionamiento del organismo para prevenir diversas enfermedades, entre ellas el cáncer.
Del mismo modo aporta proteínas y minerales como hierro, zinc y calcio, que son esenciales para combatir la anemia y la desnutrición, así como fortalecer los sistemas muscular, óseo y nervioso principalmente.
“Por estas características, la nueva variedad de quinua INIA 446 Atipaq se convierte en una buena alternativa para que los productores de quinua puedan mejorar la calidad y competitividad agrícola en los diferentes mercados, contribuir con la seguridad alimentaria y favorecer la buena alimentación de las personas”, enfatizó Arcos Pineda.
Reducción de plazo de investigación
El investigador del INIA remarcó que gracias a la aplicación de la metodología de mejoramiento genético se redujo de 10 a 6 meses el proceso de generación y lanzamiento de las nuevas variedades de cultivos.
En ese sentido, señaló que esta nueva variedad de quinua INIA 446 Atipaq se suma a la nueva variedad de papa INIA 334 Llapanchispaq, generada también en la Estación Experimental Agraria Illpa de Puno, que destaca por su buena composición genética, un rendimiento de 20 a 30 toneladas por hectárea y un incremento de más de 90 % en la rentabilidad económica de 50,000 productores de este cultivo peruano en la región Puno.
Perú, primer productor mundial de quinua
El Perú es el principal exportador y productor mundial de quinua. Comprende 65,280 hectáreas de cultivos y con una producción de 89,775 toneladas, conforme a registros del Midagri del año 2019.
Regiones productoras
Las principales regiones productoras de quinua son Puno (44% del total nacional), Ayacucho (17.6%), Apurímac (12.6%), Arequipa (9.4%), Cusco (4.7%), Junín (3.9%), Huancavelica (2.5%), La Libertad (1.7%), Cajamarca (1.3%) y otros (2.3%).